Las represas patagónicas han sido un tema de continuo debate desde el cambio de autoridades en el Gobierno Nacional. Alcanzadas en los anuncios de la ola privatizadora que aún está al caer, aún quedan dudas sobre el cómo y el cuándo con concesiones extendidas en las operativas, y obras que buscan finalizarse en las que se encuentran en construcción.
La primera noticia es la falta de ellas: las 4 represas hidroeléctricas en Neuquén y Río Negro, al norte de la región patagónica, permanecen en una etapa evaluativa con respecto a su privatización, extendiendo desde agosto las concesiones vigentes. Ahora, parece que Nación buscará integrar a los gobernadores Figueroa (Neuquén) y Weretilneck (Río Negro) a modo de veedores del proceso. Vale recordar que Alicurá, El Chocón, Cerros Colorados y Piedra del Águila representan una décima parte de la producción energética nacional y el empresario se encuentra expectante de avances en la reconversión de las hoy represas estatales a un modelo privado donde el Estado, seguramente, retenga un porcentaje de la sociedad.
Ya en Santa Cruz, el gobernador Vidal realizó una recorrida por la represa en construcción Jorge Cepernic, parte de un acuerdo con la República Popular China que se encuentra paralizado desde 2023. Desde la gobernación vienen manteniendo un contacto con el país asiático, a fin de intentar destraba el proceso y reactivar una obra que podría finalizar en 2027 y lleva casi 20 años desde su anuncio con discusiones políticas, ambientales y laborales de por medio.
Como tercera parte de este “rompecabezas”, aparece una visita de una delegación china al país. La noticia llegó como sorpresa, dado que en el ámbito diplomático, las planificaciones suelen ser largas y el momento, en medio de la guerra comercial de China y Estados Unidos, resulta cuanto menos extraña conociendo la posición del presidente Javier Milei.
Si bien la visita, compuesta de funcionarios de alto nivel y ejecutivos de empresas de renombre, parece más abocada al comercio internacional a fin de renovar un acuerdo de cooperación vigente desde 2016, vale la pena recordar que los proyectos de las represas Cepernic y Kirchner son de suma importancia para el gigante oriental, siendo parte de los proyectos de infraestructura planteados en el Belt and Road Iniciative, una conjunción de obras de infraestructura, energía y comercio que China lanzó al mundo a fin de establecerse como el líder mundial en comercio.
Aunque la relación entre Milei y China es tensa, principalmente por las declaraciones del mandatario argentino y su cercanía con el presidente de los Estados Unidos Donald Trump, tanto Argentina como China quieren terminar la obra. En el caso de nuestro país, representa más energía, más empleo y mayores capacidades de productividad a menores costos, mientras que en China se busca afianzar su posición en el Cono Sur, así como empezar a obtener dividendos del dinero ya invertido.
El sector se encuentra en un punto de inflexión: de retomarse las obras sería un punto importante para seguir estableciendo a Argentina como un líder energético en la región, que combinado con un sistema trasparente y moderno de modelo privado, podría permitir a las represas existentes una inyección de divisas para modernizarse y explorar otros esquemas de negocios.